Probablemente, no es verdad.
En la cultura estadounidense es tradicional iniciar a los bebés en la alimentación sólida a través de alimentos muy suaves y poco condimentados e ir introduciendo nuevos sabores y especias poco a poco para, supuestamente, ir fortaleciendo su tolerancia a alimentos más fuertes. Pero no existen pruebas definitivas que indiquen que esta estrategia es necesaria. Muchas culturas dan a sus hijos pequeños comida sazonada con algunas especias y hierbas en cuanto empiezan a comer sólidos, sin que esto haya tenido efectos adversos.
Así que anima a tu hijo a ser un pequeño aventurero en cuanto a sabores se refiere, desde edad temprana. Añade algo de canela, jengibre o cardamomo a su fruta y mezcla un poquito de menta en sus guisantes y patatas.
Ten en cuenta que tu bebé come cantidades muy pequeñas, así que no sazones en exceso su porción. Comienza con una pizca. ¡A lo mejor descubres que tu niño comparte tu afición al cilantro!
