Hoy quiero hablarles de esa Panamá verde que ofrece al viajero colorido, clima fresco, la belleza de sus montañas y brindan un momento perfecto para el descanso y la contemplación del paisaje natural que este hermoso país tiene para brindar. Tierras altas de Chiriquí, en las faldas del volcán Barú, Santa Fe en la zona montañosa de Veraguas, o El Valle y Campana muy cerca de la ciudad capital, ofrecen al visitante sus mejores vistas, donde la naturaleza adquiere características muy variadas. En estos sitios los días son soleados pero frescos y las noches templadas así que el descanso será reparador.
En la región central de Panamá, está la provincia de Veraguas. Ahí se encuentra la población de San Francisco de la Montaña, donde podrás visitar una pequeña capilla de piedra y madera (construida en 1671); en ella verás hermosos altares de madera tallada. También, en la misma región, se encuentra Calobre, que es un pequeño pueblo dentro de un área denominada Monumento Nacional por sus pozos de aguas termales de origen volcánico. No dejes de pasar por Santa Fe, un idílico pueblo fundado en 1557, rodeado de muchos pinos y con una temperatura muy agradable todo el año.
Si decides visitar el imponente Volcán Barú, has de saber que las poblaciones de montaña que le rodean disfrutan de un clima muy agradable y de campos de cultivos que dan la sensación de una eterna primavera. Las localidades más conocidas son volcán, Cerro Punta, Caldera y Boquete, todas estas están situadas a más de 2000 metros de altura, incluyen pozos de aguas termales y restos arqueológicos de antiguas culturas indígenas. Los habitantes de estas zonas son gente trabajadora y afable, están dedicados fundamentalmente a la producción agropecuaria y al cultivo del café.
Cerca de la capital se encuentra la provincia de Coclé, donde hay pequeñas comunidades que se interconectan por carreteras y caminos con un gran atractivo paisajístico. Este trayecto incluye pequeños pueblos como El Copé, La Pintada, Las Minas, Toabré, Tambo, Churuquita Grande y muchos más. Si te gusta dar un paseo calmado y el clima fresco esta zona te va a encantar, aparte de que podrás visitar las casas tradicionales de la región, cuyas paredes de adobe y techos de tejas artesanales desafían con temeridad el paso del tiempo.
A dos horas de viaje por carretera desde la ciudad capital hay una población de montaña asentada en el cráter de un volcán extinto. El Valle es un lugar idílico con clima perfecto en el que florecen las orquídeas, crecen árboles de tronco cuadrado y procrean las ranas doradas. El lugar ofrece artesanías, baños en aguas termales y senderismo de montaña. Más cerca de la ciudad está Campana, una formación montañosa de excelente clima y espléndido paisaje, ubicada dentro del área protegida del Parque Nacional Altos de Campana. Desde Campana se puede ir hasta Chicá, pintoresco poblado que ofrece al visitante la oportunidad de observar hermosos especímenes de aves y otros animales.
¡¡¡Ven y disfruta!!! del ecoturismo en Panamá.
