Convierte a tu mamá en tu mejor amiga! (los beneficios te sorprenderán) | Entiendelas.com

Convierte a tu mamá en tu mejor amiga! (los beneficios te sorprenderán)

La mayoría de las adolescentes, cuando estamos en plena etapa de rebeldía, vemos a nuestra mamá como la peor enemiga, la “fastidiosa”, la “sobreprotectora” o peor aún como la que te complica la vida. Esto pasa porque nos queremos comer al mundo, porque creemos que tenemos todo lo necesario para resolvernos la vida solitas. Es por ello que no vemos quién nos hace la comida, quién nos arregla el desorden la mayoría de las veces e incluso quién es nuestra alarma por las mañanas.

madre e hija amigas_1

¿Cuántas veces tu mamá no fue a hablar con un profesor al colegio porque estabas saliendo mal?, seguramente lo veíamos como “una raya”, “qué pena mamá”, pero, ¿alguna vez le agradecimos que por esa ayudadita empezamos a preocuparnos más por nuestras notas?, y como dicen ellas “tu trabajo es salir bien en tus estudios”.

A medida que vamos creciendo, quemando etapas, “madurando” y que nos damos cuenta que la vida no es tan fácil como cuando éramos niñas, nos percatamos que la única que ha perdurado en el tiempo, apoyado nuestros logros y ha estado ahí para darnos una palabra de aliento en cada traspié que hemos tenido es nada más y nada menos que nuestra mamá, quién a pesar de todo lo que hacemos y lo mal que muchas veces la tratamos sigue queriéndonos y pendiente de nosotras con cosas tan simples pero importantes como el ¿comiste, qué comiste?

Convertir a tu mamá en tu mejor amiga trae mucho más beneficios para ti que para ella y te vamos a explicar por qué:

Cuando estamos chiquitas nuestra mayor preocupación es simplemente jugar todo el día sin parar, no nos importa si comemos, si nos bañamos o si hacemos la tarea. ¿Y quién es la que nos crea el hábito de cumplir con todas esas obligaciones? ¡Mamá!

Research by Megan Gilligan, from left, a Purdue doctoral student, and Jill Suitor, a professor of sociology, found that older mothers are more likely to be stressed when they receive help from an adult child who is not their preferred caretaker. (Purdue University photo/Andrew Hancock)

¿Quiénes pueden olvidar cuándo se desarrollaron? ¿Cuándo no sabían que pasaba en ese momento? Creo que para una mujer esa es su primera prueba de fuego (luego viene depilarse y enamorarse) pero ¿quién no salió corriendo por toda la casa gritando ¡Mamáaa qué es esto!? No llamamos a una de nuestras amiguitas para pedirles consejo, porque para eso está la mujer más importante de nuestra vida.

Quizás en lo menos que les tenemos confianza a las mamás es en cuestiones de amor, no nos atrevemos a contarle sobre nuestro primer novio o nuestro primer beso, y nos olvidamos que hay un refrán muy cierto “más sabe el diablo por viejo, que por diablo”, y esa es la razón por la que es buenísimo hacerlo, recuerda que jamás pero jamás tu mejor amiga va a tener las experiencias vividas que tu mamá y créanme que la mejor consejera en situaciones de despecho es MAMÁ porque si hay algo que es verídico es que cuando ella dice “ese muchachito no me gusta” y nosotras decimos “otra vez con lo mismo mamá” al tiempito (ya verán que pasará rapidito) vamos a decir “mi mamá tenía razón” aunque jamás se lo hagamos saber por aquello que llamamos orgullo.

Es bueno tener presente siempre que la única que siempre va a desear lo mejor para nosotras, para nuestra vida y para nuestro futuro es ella, ahí no vale tu mejor amiga desde la infancia, ni tu novio, ni tu prima, ni ninguna otra persona.

Family conflict

Nuestro mayor beneficio como hijas es tenerla a ella, a esa compañera de lágrimas, a la que te deja en pena en tu acto de grado cuando grita ¡esa es mi hija!, incluso a esas que escriben en el vidrio de su carro ¡al fin mi hija de graduó sin reparar!, y esa que llora a montones cuando te casas o te independizas aunque toda tu juventud te haya dicho “hija ve si te casas”.

Todas tenemos madres distintas, con diferente carácter, unas más estrictas que las otras, pero más allá de todo eso ¡son madres!. Cuídala, respétala y conviértela en tu mejor amiga. A la larga te darás cuenta que sin ella, tu vida hubiese sido muy, pero muy difícil.