Muchos jóvenes empiezan a darse cuenta de su homosexualidad o bisexualidad durante la adolescencia, e incluso, especialistas en el área aseguran que mucho antes, en gran parte durante su niñez.
A pesar de que actualmente la sociedad es cada vez más abierta y la homosexualidad es un hecho más aceptado social y legalmente en gran parte de los países del mundo, para muchas personas esto sigue representando un problema serio a la hora de la convivencia social, ocasionando que los niños, jóvenes y adultos sigan viendo y asumiendo su condición como “un problema”.
Y así como resulta una “complicación o problema” para ellos, también lo es para muchos padres; puesto que, enterarse hoy en día que su hijo es gay o que tiene dudas sobre su orientación sexual, suele ser un golpe bastante duro. En algunos casos, puede llegar a costarle aceptar la noticia y, sobre todo, afrontarla.
Si tú estás pasando por esta situación y no sabes cómo actuar o qué puedes hacer para apoyar a tu hijo, ten calma y no te preocupes. A continuación, te brindamos una serie de consejos que te ayudarán a asimilar la noticia y sobre todo a comprender a tu hijo en este momento que tanto te necesita.
¿Qué hacer si tu hijo te dice que es gay?
Escúchalo con atención. Para empezar, debes tener siempre presente que, si tu hijo ha tomado la decisión de contarte y acercarse a ti para hablar abiertamente del tema, lo más probable es que le haya costado muchísimo. Escúchalo sin juzgar. La expresión de tu amor y aceptación es sumamente importante para el bienestar de tu hijo en esta etapa que está atravesando.
No te culpes. En muchas ocasiones puede que te sientas culpable de la situación o de no haber descubierto a tiempo la verdad. Debes saber que esto no te hace bien y tampoco le hace bien a tu hijo. Acepta la realidad y deja las culpas atrás, nadie es responsable de la homosexualidad.
No lo hostigues. Por más mente abierta que seas como madre, es entendible que esta noticia inicialmente te provoque desconcierto, impotencia, dolor, sorpresa, y te cueste asimilarla. Una reacción típica que posiblemente puedas tener es intentar reinterpretar lo que tu hijo te ha dicho, hostigarlo preguntándole si está seguro e incluso tratar de convencerlo de que está confundido y cometiendo un error; esto no es sano para tu hijo ni para ti, pues puedes crear un dolor mayor. Debes aceptar que por más que lo hostigues, la realidad no va a cambiar.
Busquen ayuda. Durante esta etapa tu hijo necesitará que lo apoyes, para esto ofrécele con amor y comprensión que te acompañe a un especialista en el tema para que los oriente a ambos en los pasos a seguir como familia. Hazle sentir que lo apoyas y que puede confiar en ti.
Bríndale tu apoyo. Trata de aprender de tu hijo y crezcan juntos como personas, dejando el miedo y los prejuicios sociales a un lado. Descubre poco a poco la nueva realidad de tu hijo y orienta tu comprensión hacia él. Hazle saber que estás allí y que pase lo que pase no está solo. Él te lo agradecerá.
Enfrentarse a la noticia de tener un hijo homosexual, lesbiana, bisexual o transexual no es fácil, sin embargo, con el tiempo verás que aprenderás a sobrellevar la situación. No te presiones, ni lo presiones a él. Vivan el proceso poco a poco, al final el amor por tu hijo siempre prevalecerá por encima de todo.
